Lo dejo. Gracias, amigos; fue un placer. Este es el mundo del miedo y de la carne; poner todo mi esfuerzo en algo tan inútil trajo a mi vida sólo desaire y decepción. Fui mi propio verdugo. He ganado en papelerío; he perdido todo el resto. Adiós; que el futuro os sea leve y la posteridad ponga alguna que otra flor sobre vuestra tumba. Es hora de marchar.
Sé feliz allá donde vayas… Un abrazo desde Algorta.
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Te he conocido por poco tiempo, pero ha sido un placer.
Que tus pasos se encaminen hacia la felicidad.
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Au revoir
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El ser y la constante lucha con sus demonios. Véncelos y regresa!
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¿allá donde los cantos te rodean día y noche? buen viaje
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Ciao, bambino
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