–El sendero
en campo de oro
no sólo muere
sino que reverdece.
Así dijo Zarathustra,
entre trigales
heridos de amapolas.
ALEA EIACULATA
–El sendero
en campo de oro
no sólo muere
sino que reverdece.
Así dijo Zarathustra,
entre trigales
heridos de amapolas.